PROA no persigue descubrir nuevos antibióticos, ni tampoco novedosas estrategias terapéuticas. Su objetivo es tratar de que en la práctica clínica se aplique lo que la investigación clínica ha demostrado eficaz. Y lograrlo pasa por el cambio (de comportamientos).
Por esta razón los profesionales que se dedican a PROA deben entender muy bien los motivos por los que se produce esta discrepancia entre evidencia y PROA. Y una vez identificados diseñar actividades cuyo fin sea eliminar las barreras que dificultan la puesta en práctica de los comportamientos deseados (política antibiótica) y fomentar aquellos factores que ayudan a su cumplimiento. Y esto se puede hacer de forma intuitiva (estilo ISLAGIATT de «It Seemed Like A Good Idea At The Time.) o de una manera científica teniendo en cuenta lo que nos enseñan otras disciplinas como las ciencias sociales y las ciencias del comportamiento.
Y de eso trata el curso «Utilising Social Science and Behaviour Change in Antimicrobial Stewardship Programmes» (gratuito) organizado por la British Society of Antimicrobial Chemotherapy en la plataforma de cursos MOOC FutureLearn. No es un curso clínico. No hay casos clínicos. No se discuten aspectos diagnósticos ni la base científica avaladas en guías clínicas. Simplemente enseña a identificar problemas, a entender sus causas y a diseñar actividades que tengan impacto en/con los prescriptores. Clínicos, microbiólogos y farmacéúticos hospitalarios no estamos acostumbrados a esta terminología y métodos pero si queremos influir en el uso de antibióticos nos tenemos que subir al carro.
PROANTIBIOTICOS 
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